Aunque a veces a muchos no les guste admitirlo, las comedias románticas son un subgénero que ha logrado ganarse el corazón del público en el cine, la televisión y en el streaming. ¿Por qué? Puede que sea porque son sencillas de ver y digerir, nos distraen un poco de nuestra vida y, lo más importante, nos entretienen incluso cuando muchas veces tratan sobre problemas banales, improbables y hasta tontos.

Las comedias románticas navideñas tienen un tinte todavía más especial. Para aquellos que aman las fiestas y disfrutan de ver contenido relacionado con la época, son todo lo que pueden pedir. Y, para quienes no tienen tan arraigado el espíritu navideño, son una buena forma de conectar con él. 

Pero, ¿cuántas comedias románticas LGBT hay? Y, acortando un poco más la lista, ¿cuántas que además transcurran bajo el encanto de las fiestas? Sí, para sorpresa de nadie el repertorio es casi nulo y es por eso que tenemos que hablar de Happiest Season.

Hace muy pocos días, Hulu estrenó el film protagonizado por Kristen Stewart y Mackenzie Davis en su plataforma (que lamentablemente no está disponible en todo el mundo), y desde entonces ha causado un enorme revuelo en redes sociales. ¿Por qué? Bueno, ya lo dijimos, es un hallazgo casi imposible, una comedia romántica navideña LGBT. Pero, hay mucho más detrás de este fenómeno.

Por un lado, el elenco de primera línea no es un dato mejor, porque a Davis y Stewart se le suman nombres como Daniel Levy, Aubrey Plaza, Alison Brie, Victor Garber y Mary Steenburgen. Sí querían certificados de garantía, ahí los tienen.

Pero, tener un cast plagado de estrellas no es suficiente para sostener una buena historia, y es ahí donde Happiest Season brilla más. ¿Es la película más original del mundo? Definitivamente, no. Con un precepto tan simple como: se acerca navidad, quiero que conozcas a mi familia porque somos pareja, la película arranca y avanza como cualquier otra. ¿Evita los clichés? Para nada, es otra historia sobre la salida del closet donde encontramos a una familia conservadora y preocupada por las apariencias, empujando (sin saberlo) a una de sus hijas a ocultar quien realmente es por un “bien mayor”. Y sí, muchos creen que por volver a abordar este tipo de problemáticas, la historia no ayuda a normalizar. Pero, ¿saben qué? Es todo lo contrario. 

No hace falta decir que no todo el mundo está fuera del closet, así que partiendo desde ahí, la película ya aporta su granito de arena para quienes puedan identificarse con el personaje de Harper, pero de lo contrario, también están Abby, Riley y John. Cada uno con una historia diferente.

Lo que consigue que Happiest Season ayude a normalizar no es la trama, no es que la familia de Harper terminé aceptando a su hija y a su novia, y se muestren como grandes aliados. No. Es, precisamente, estar hablando de una comedia romántica navideña, un género que parecía exclusivo para los romances heterosexuales o heteronormativos, cuando el amor no conoce de géneros. 

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