Hazelight Studios es la empresa responsable de Brothers: A Tale of Two Sons y A Way Out, juegos que hablan sobre la cooperación entre dos personajes. El segundo es un título que sólo se puede jugar de a dos y con su lanzamiento de 2021, vuelven a hablarle a ese público particular con It Takes Two.
La historia del nuevo título tiene como protagonistas a Cody y May, una pareja a punto de divorciarse. Cuando su hija percibe la situación, le pide un deseo a un libro de terapia de parejas y cosas extrañas comienzan a pasar. Cody y May se convierten en muñecos de madera, arcilla y lana y deberán emprender una aventura llena de momentos cooperativos para volver a sus cuerpos y salvar su matrimonio.
Por suerte, It Takes Two no se toma demasiado en serio a sí mismo y propone una experiencia muy divertida de principio a fin. Cada nuevo nivel del juego presenta una nueva mecánica en la que las habilidades de Cody y May se complementan para poder avanzar por los geniales escenarios y derrotar a los jefes de cada sector. No hay mucho tiempo para descansar o escenas cinematográficas muy extensas, sino que constantemente estamos descubriendo todo lo que el juego tiene para ofrecer. It Takes Two no nos da tiempo para aburrirnos.
Las actuaciones de los personajes principales logran que nos metamos de lleno en la aventura. Como dije más arriba, hay mucho para reír gracias a ciertos personajes y situaciones, pero al tratarse de una historia de amor también hay momentos emotivos de los que no podemos escapar.
Los escenarios son diferentes sectores de la casa de Cody y May, desde un cobertizo a diferentes habitaciones, pasando por un gran árbol lleno de secretos y otros lugares no tan agradables. Al no tomarse tan en serio, algunos capítulos del juego pueden volverse extremadamente bizarros y divertidos.
Cody y May son obligados a complementarse constantemente y a trabajar en equipo, salvo en ciertas situaciones donde se pueden descubrir pequeños minijuegos. Ahí, vale todo y los jugadores pueden enfrentarse para ver quién es el mejor, lo que también aporta a esta completa experiencia desde otro lado.
Es cierto que It Takes Two apunta a un sector de jugadores muy particular porque obliga a jugar de a dos sí o sí, pero es una experiencia casi única de las que ya no se hacen. Por suerte, aquellos que se compren el juego tienen la posibilidad de «prestarlo» a un amigo para poder jugar sin necesidad de que ambos lo adquieran.
A pesar de no ser un título de la nueva generación de consolas, lo nuevo de Hazelight se ve muy lindo. No porque sus gráficos sean de la más alta definición y los charcos de agua reflejen la realidad, sino porque artísticamente hay mucho trabajo puesto en el diseño de los personajes, los escenarios y los enemigos. La inmensa variedad visual que ofrece It Takes Two mientras nos da un nuevo par de herramientas para seguir avanzando es mucho más genial del tiempo que tenemos para apreciar todo eso.
Lo cierto es que no suelen hacerse videojuegos pensados de esta manera y es una experiencia que todo fan del juego cooperativo tiene que probar. Además, puede funcionar como terapia de pareja según sus propios creadores.
It Takes Two ya es uno de los mejores videojuegos del año, tanto gracias a su originalidad como su ejecución, pero además es una de las mejores experiencias cooperativas de la historia de los videojuegos. Puede ser que esto se deba a que no hay tantos juegos específicamente creados con eso en mente, pero no por eso es un título menor.