Tras el lanzamiento del primer trailer de la próxima Misión: Imposible, reflexionamos sobre el estado actual de la saga y su futuro.

“Nuestras vidas no se definen por una sola acción. Nuestras vidas son la suma de nuestras decisiones”. Así arranca el nuevo adelanto de Misión: Imposible – Sentencia Final (Mission: Impossible – The Final Reckoning, 2025), la octava y –en apariencia– última entrega de la saga protagonizada por Tom Cruise, como el agente del FMI Ethan Hunt. Decimos ‘en apariencia’ porque sabemos que en Hollywood las despedidas no son para siempre, aunque la atmósfera de esta nueva aventura parece anunciar un cierre de ciclo para el actor, que lleva casi 30 años interpretando al personaje.  

Así es, pasaron 28 años desde el estreno de Misión: Imposible (Mission: Impossible, 1996) de Brian De Palma, primera adaptación cinematográfica y secuela de la serie de TV creada por Bruce Geller. La última vez que vimos a Hunt, su historia quedó ‘incompleta’ en Misión: Imposible – Sentencia Mortal Parte 1 (Mission: Impossible – Dead Reckoning Part One, 2023), un éxito poco tímido –rozando el fracaso comercial– que apenas recaudó 571 millones de dólares a nivel mundial. 

El avance de Sentencia Final parece haber entusiasmado a los cinéfilos y fans con su épica, sus escenas cargadas de acción y riesgo y la acentuación en ‘final’, como si se tratara de Avengers: Endgame (2019). Y, para ser sinceros, la película necesita llamar la atención, justamente, porque Sentencia Mortal no logró su objetivo de conquistar al público general y replicar el suceso de Misión: Imposible – Repercusión (Mission: Impossible – Fallout, 2018) y, mucho menos, el de Top Gun: Maverick (2022).   

Es verdad que Tom Cruise sigue siendo una de las pocas estrellas que atraen gente a las butacas, pero ese ‘poder’ estelar quedó un poco maltrecho en 2023, a pesar de las buenas críticas que recibió la cinta dirigida por Christopher McQuarrie. Son varios los factores detrás de la fallida ‘parte uno’, un enfoque que van a tener que afilar si pretenden cerrar esta etapa de la franquicia con broche de oro.

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¿QUÉ SALIÓ MAL CON SENTENCIA MORTAL PARTE 1?

La pandemia de Coronavirus no solo obligó a cambiar, varias veces, la fecha de estreno de la séptima entrega de esta saga (originalmente estipulada para el 23 de julio de 2021), también abultó su presupuesto debido a las medidas sanitarias que tuvieron que adoptar para finalizar el rodaje. Se estima que el costo final superó los 290 millones de dólares, de ahí el fracaso comercial –a medias– de la película. La fecha elegida para su lanzamiento tampoco fue la ideal, aunque haya sido en pleno verano boreal; apenas diez días antes de que Barbie (2023) y Oppenheimer (2023) aterrizaran en los cines, esta última, sacándole todas las pantallas IMAX, al menos, por tres semanas de exclusividad. 

Oppenheimer solo necesitó un fin de semana para demostrar su poderío en el formato premium y el grave error cometido por Paramount Pictures al querer competir, de igual a igual, con el drama histórico de Christopher Nolan. El éxito descomunal de Barbenheimer y el poco interés de la audiencia por las acrobacias de Cruise sellaron el destino de Misión: Imposible – Sentencia Mortal Parte 1 en la taquilla, tanto así, que la película perdió el ‘Parte 1’ cuando llegó a los formatos caseros y digitales. Lo que nos lleva a ese otro problema: dividir una historia en dos partes no siempre es la mejor idea. Mucho más, cuando hay que esperar dos años para ver el desenlace.

Pero con Misión: Imposible hay un inconveniente aún mayor, una creciente necesidad de promover cada película a partir de la dificultad de las escenas de riesgo llevadas a cabo por Tom, olvidándose de que, detrás de los saltos y las corridas, hay una historia que contar. 

La realidad es que nadie espera mucha originalidad en este tipo de franquicias donde los esquemas de buenos y malos se repiten. El conflicto y el villano deben ser lo suficientemente atractivos, así como el ‘misterio’ y el peligro que van a enfrentar nuestros héroes. La fórmula funciona porque conocemos los mecanismos, pero las mejores entregas de la saga supieron balancear la acción, el suspenso y la emoción, cortesía de los protagonistas.  

Lamentablemente, el marketing de Sentencia Mortal se enfocó demasiado en las proezas de Cruise y la secuencia del salto en motocicleta, desmenuzada hasta el hartazgo en videos promocionales del detrás de escena y entrevistas que contaban cada uno de sus trucos. La gente no necesitó ir al cine para ver el resultado final, disponible en YouTube y redes sociales, gracias a los influencers y youtubers. A veces, el tiro sale por la culata, por eso, Sentencia Final parece haber cambiado su enfoque promocional, decantándose por la acción y la arista sentimental de la saga –y la nostalgia acumulada a lo largo de tres décadas– para reconquistar a su público. 

Misión: Imposible – Sentencia Final llegará a los cines en mayo de 2025, tiempo suficiente para enderezar la nave y encontrar el equilibrio que garantizó el suceso de una de las franquicias más celebradas. 

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