Tras el fracaso de las negociaciones entre SAG-AFTRA y los estudios de Hollywood, el sindicato prohíbe disfraces y rechaza la propuesta de grandes estrellas.
Las cosas se ponen cada vez más complicadas en Hollywood. A pesar de que AMPTP y WGA lograron llegar a un acuerdo con los escritores, retomando varios de los proyectos que estaban en pausa, la situación con los actores y los estudios no luce nada bien. De hecho, parecen estar peor que antes de que comenzara la huelga hace más de 95 días, siendo ya la más larga de SAG-AFTRA contra los productores.
De hecho, el asunto ha escalado hasta un punto en que el sindicato ha tenido que prohibir utilizar disfraces de Halloween que representen producciones exitosas, porque podría representar publicidad para films o series que han provocado la situación actual.
Es decir, que los trajes de Barbie, Ken, el científico Oppenheimer y hasta el mismísimo Jack Sparrow tendrán que quedarse guardados y en su lugar exhortan a elegir “disfraces inspirados en personajes y figuras generalizadas (fantasmas, zombis, arañas, etc)”. Vía Variety.
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Las grandes estrellas quieren acabar con la huelga
Un grupo de actores de primera línea que incluye a George Clooney, Scarlett Johansson, Ben Affleck y Emma Stone se acercó a SAG-AFTRA para obtener detalles sobre el estado de las negociaciones y realizar una propuesta para mejorar la situación.
Estos eran los detalles de la propuesta:
- Aportar alrededor de $150 millones de dólares al gremio en 3 años para que los miembros que más necesitan el ingreso puedan tener seguro médico y una ayuda mensual.
- Ese dinero saldría de una modificación en el contrato gremial, donde los actores y actrices que más ganan tendrían que aportar más en su cuota al gremio.
- Un cambio en la forma en que se pagan las regalías de cada película o serie. De esta manera, a los extras se les pagaría primero, después papeles pequeños y así hasta llegar a los protagonistas.
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¿Por qué no pueden aceptar lo propuesto por los A-Listers de Hollywood?
Fran Drescher, presidente de SAG-AFTRA, agradeció la propuesta y explicó porqué no pueden aceptarla:
- Las contribuciones que pueden ir a nuestros fondos de pensiones y de salud deben ser del empleador. Entonces, aquello por lo que luchamos en términos de beneficios tiene que quedar en este contrato.
- En cuanto a los residuales, lamentablemente, no se sostiene porque, francamente, se trata de un castillo de naipes con muchos matices.