Nos unimos al debate por lo sucedido con Greta Gerwig y Margot Robbie tras las nominaciones a los Oscar 2024, y su ausencia en dos de las categorías más importantes.

“Los directores siempre han sido una rama quisquillosa, a menudo, prefiriendo un realizador de lengua extranjera a un cineasta convencional. No parece gustarles recompensar a los cineastas de gran éxito. Y rara vez premian películas de ciencia ficción o con muchos efectos especiales”. 

Este comentario, de un experto e insider de la temporada de premios, no se refiere a lo ocurrido esta semana tras anunciarse los nominados para la 96° entrega de los premios Oscar donde, para algunos, hubo serias omisiones al dejar afuera a Margot Robbie y Greta Gerwig, las principales responsables del éxito de Barbie.    

No, el mencionado comentario tiene más de una década de antigüedad cuando, en  2011, otra película taquillera con visión autoral recibió ocho nominaciones al premio de la Academia, dejando de lado a su director: El Origen (Inception, 2010). Los paralelismos entre Christopher Nolan y Gerwig van mucho más allá de las coincidencias, y para analizar por donde pasan los prejuicios de los votantes, nos tenemos que remontar un poco más atrás, a la película que redefinió el blockbuster moderno y al realizador más exitoso de todos los tiempos. 

¿Adivinaron? Hablamos de Steven Spielberg y Tiburón (Jaws, 1975), una dupla que atravesó la misma situación casi cinco décadas atrás. La historia del escualo gigante revolucionó el cine comercial de la década del setenta, rompiendo más de un récord en las recaudaciones a nivel mundial y convirtiéndose en todo un ícono del séptimo arte, no del todo bien visto por cierto sector de la industria. Para muchos, Spielberg –uno de los referentes del Nuevo Hollywood y la mirada de autor– había vendido su alma al sistema y no merecía recompensa alguna.

Tiburón consiguió cuatro nominaciones al Oscar, incluyendo la de Mejor Película, pero el lugar de Steven en la categoría de Mejor Director lo terminó ocupando Federico Fellini por Amarcord (1973). Sí, “un realizador de lengua extranjera”. Lo extraño de todo este asunto: Amarcord compitió y ganó en la categoría de Película Internacional (en aquellos años Película en Idioma Extranjero) en la ceremonia del año anterior. 

OSCAR 2024: NOMINADOS, SORPRESAS Y OMISIONES

¿Las películas se dirigen solas?

Incluso en la era de solo cinco nominadas a Mejor Película –previo a su expansión en 2009–, pocas veces las cinco cintas destacadas fueron de la mano con los cinco realizadores elegidos por los votantes. Entonces, ¿a qué viene tanta indignación por la omisión de Gerwig, quien igual obtuvo una merecida nominación a Mejor Guion Adaptado? 

Los más de 1.4 mil millones de dólares recaudados en todo el mundo y el fenómeno cultural que generó este estreno –de la mano del Barbenheimer– pueden tener algo que ver con la repercusión en las redes y algunos medios en busca de views y clics. Una ‘polémica’ más asociada a los gustos personales de los espectadores casuales y fans, que a la propia industria y sus elecciones al momento de otorgar sus premios más brillantes. 

Pero la Academia no siempre fue (o es) tan snob. En 1978, La Guerra de las Galaxias (Star Wars, 1977) consiguió la doble nominación de película y director, y hasta Spielberg se coló entre los cinco realizadores candidateados gracias a Encuentros Cercanos del Tercer Tipo (Close Encounters of the Third Kind, 1977). Y, aunque ninguno de ellos se llevó el hombrecito dorado a casa, no podemos acusar a los votantes de no saber capturar el Zeitgeist del momento. 

También, puede fallar. “¿Cómo es que las películas comiqueras nunca son nominadas? ¿Cómo es posible que mil millones de dólares no se consideren sofisticados?” planteó (y cantó) en vivo y en directo el mismísimo Hugh Jackman, durante su acto de apertura en la ceremonia de los Oscar de 2009. 

El reclamo hace referencia directa a la omisión de Batman: El Caballero de la Noche (The Dark Knight, 2008), otro film de Nolan que consiguió ocho candidaturas, pero se le escaparon las principales (Mejor Película, Mejor Director, Mejor Guion Adaptado) en un año bastante flojo para el cine. 

Tal fue la presión e indignación (de los medios, los fans y la industria), que al año siguiente la Academia amplió a un máximo de diez spots la categoría de Mejor Película –la llamada, cariñosamente, regla The Dark Knight– con la intención de sumar diversidad y visibilidad desde las historias y, por qué no, incluir más obras de géneros como el terror, la ciencia ficción, la fantasía y los superhéroes. 

Avatar (2009), Sector 9 (District 9, 2009) y Up: Una Aventura de Altura (Up, 2009) fueron las primeras en gozar de este ‘beneficio’, pero una década y media después de la implementación, los votantes le siguen dando la espalda a la mayoría de los blockbusters más “sofisticados” y a sus directores, reafirmando la vieja y absurda teoría de que lo comercial no va de la mano con lo artístico. Tampoco la cantidad de vacantes entre una y otra categoría, ya que, al final del día, seguimos teniendo diez cintas nominadas y solo un lugar para destacar el trabajo de cinco realizadores. 

RAZZIE AWARDS: LOS NOMINADOS A LO PEOR DEL AÑO

Los casos Greta Gerwig y Margot Robbie 

Y acá es donde retomamos el dilema de Barbie y sus supuestas omisiones. Podemos discutir que Robbie se merecía un lugar entre las nominadas a Mejor Actriz –igual recibió una mención como productora de la película– en un año súper competitivo, pero podemos decir lo mismo de otras intérpretes destacadas como Greta Lee (Past Lives), Cailee Spaeny (Priscilla) o Natalie Portman (Secretos de un Escándalo), que también se quedaron afuera. 

Al final del día, los votantes prefirieron la trayectoria de Annette Bening (Nyad) y la gran actuación de Sandra Hüller (Anatomía de una Caída), suponiendo que sean ellas las responsables de ocupar ese preciado quinto lugar entre las candidatas.   

El caso de Gerwig es muy diferente y, como ya señalamos, tiene mucho que ver con las matemáticas y los “directores quisquillosos” que prefieren premiar películas más serias en vez de a los blockbusters. Le pasó a James Cameron con Avatar: El Camino del Agua (Avatar: The Way of Water) y a Joseph Kosinski con Top Gun: Maverick, las películas más exitosas de 2022. También a Ryan Coogler y Pantera Negra (Black Panther): un hit de la pantalla grande con la misma relevancia cultural para la comunidad afrodescendiente. 

Aunque bien podrían haber entrado dos directoras entre los cinco nominados, ¿es justo sacar la carta machista cuando se trata de Barbie? ¿Estaríamos diciendo lo mismo si alguno de los realizadores le hubiese cedido el lugar a Celine Song por Past Lives? Las quejas por la omisión de Greta, ¿tienen que ver con la falta de representación, la calidad de la película o la necesidad de galardonar al suceso cinematográfico más grande de la temporada? 

OSCAR 2024: UN AÑO DE RECORDS Y MUCHAS CURIOSIDADES

El Oscar siempre generará debates

Todas las posibilidades son válidas y dependerá del análisis –y los gustos personales– de cada uno. En mi opinión (porque no da ser tibio), la elección de Justine Triet por Anatomía de una Caída es perfecta, aunque también me hubiese gustado ver a Song entre los cinco nominados de este año con su debut poderosísimo. 

¿A quién sacaría de los realizadores masculinos (Nolan, Martin Scorsese, Jonathan Glazer y Yorgos Lanthimos)? Esa es la pregunta imposible de contestar porque todos merecen el debido reconocimiento y, claro, ahí también pesa el favoritismo. Además, teniendo en cuenta los precursores y los premios otorgados por la crítica hasta el momento, sus films se destacan por sobre el de Gerwig. 

Hay muchos factores a tener en consideración antes de tildar estás omisiones como injustas o mal intencionadas. De entrada, saber cómo piensan los votantes de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de Hollywood: un conglomerado que (todavía) no tiene la equidad necesaria, pero que cada día suma nuevos miembros internacionales, algo que se deja ver en la selecciones más diversas en cuanto a los títulos de los últimos años.  

Si este fuera un año donde solo compiten cinco películas nominadas en vez de diez, ¿Barbie sería una de las elegidas? Personalmente, creo que no, por eso las ocho nominaciones que recibió se festejan a lo grande. Al fin y al cabo, Greta Gerwig ahora se puede jactar de formar parte de un grupo selecto acompañada de nombres como Spielberg, Cameron y Nolan, donde el mega éxito puede ser alienante y, tal vez, crear un poco de celos.  

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