Esta semana llega a los cines argentinos y de casi todo el mundo la esperadísima, y varias veces retrasada próxima película de James Bond: Sin Tiempo Para Morir (No Time to Die), la última en la que Daniel Craig se pondrá en la piel del famoso 007.
Algunos miembros de la prensa internacional ya pudieron disfrutar de esta nueva aventura en la historia del popular personaje, y salieron a la luz las primeras reacciones respecto al film que pretende ser un homenaje no sólo al legado de Craig, sino para la franquicia completa:
Patrick Cavanaugh, ComicBook.com: «No Time to Die se las arregla para servir al público casi todo lo que desearían de una película de Bond, ya sea el debut o la entrada final de un actor, mientras se las arregla para evitar las trampas de la serie. La trama termina sintiéndose no esencial, como lo hace Safin en toda la trayectoria. Sin embargo, todavía tenemos múltiples momentos sorprendentemente conmovedores con Craig, lo que lo convierte en una despedida ganada para el actor cuyo casting inicial para Casino Royale recibió una reacción violenta de los fanáticos, pero ciertamente ofrece al actor la oportunidad de mostrar todas las habilidades de su arsenal que con tanta razón se merece».
Brian Lowry, CNN: “Bond también encuentra su puesto en el MI6 habiendo sido hábilmente ocupado por un nuevo agente (Lashana Lynch) que ha heredado su licencia 007. Sin embargo, si bien Lynch hace una fuerte adición, sus bromas de riña son relativamente débiles y simplemente se suman a la abundancia de partes móviles que la trama aún más complicada de lo habitual tiene para servir. Un tema subyacente es que el mundo ha cambiado, ciertamente desde el período de la Guerra Fría en el que nació el personaje, nublando las alianzas y haciendo, como Leiter reflexiona, «difícil distinguir el bien del mal». Esa medida de complejidad, sin embargo, no ha mejorado una fórmula construida sobre villanos que amenazan el mundo y acción muscular”.
Peter Bradshaw, The Guardian: “La última película de Craig como la diva de la inteligencia británica es una tormenta épica, con el guión de Neal Purvis, Robert Wade, y Phoebe Waller-Bridge entregando patetismo, acción, drama y comedia de campo (Bond llamará a M ‘querida’ en momentos de irritabilidad ), angustia, horror macabro y acción anticuada escandalosamente tonta en una película que recuerda el mundo del Dr. No en su isla. El director Cary Fukunaga lo expresa con un estilo increíble, y la película también nos muestra un Bond romántico, un Bond lujurioso, un Bond que no tiene miedo de mostrar sus sentimientos, como el viejo blando que resultó ser”.
Nicholas Barber, BBC: “La trama que se estaba desarrollando antes era demasiado complicada, pero Fukunaga y su equipo mantienen la acción corriendo a una velocidad sin aliento y de formas que parecen más o menos lógicas. Con tanto para encajar, no todos los elementos son satisfactorios. La hermosa agente de la CIA de Ana de Armas se las arregla para ser encantadoramente tonta e hiper competente, por lo que es una pena que no tenga más que hacer. Es demasiado joven, demasiado húmeda y demasiado insensible para ser un villano clásico de Bond. Sí, también hay otros elementos que no alcanzan las alturas que pretenden, en general, No Time To Die hace exactamente lo que se pretendía hacer, que es redondear a Craig con tremenda ambición y aplomo. Más allá de eso, de alguna manera logra tomar algo de todas las demás películas de Bond y unirlas todas. Para citar cierta canción que reaparece melancólicamente: si eso es todo lo que tenemos, no necesitamos nada más”.
Johnny Oleksinki, New York Post: “La madurez de Craig se muestra en sus emociones. Sigue siendo confiado y agresivo, pero errático y se enoja rápidamente. Nunca ha sido más vulnerable, ni tampoco el personaje que aquí vemos. También lo acompañan tres chicas Bond muy diferentes: junto a Madeleine, que se convierte en terapeuta, están la agente del M16 Nomi, Lashana Lynch y Ana de Armas como agente de la CIA que «ha tenido tres semanas de entrenamiento». Las tres son fabulosas y resaltan los tonos variados en el inquietante Craig. Malek es el excéntrico bicho raro que esperarías que fuera como un maníaco empeñado en destruir el mundo con armas químicas. Pero un poco más de historia de fondo sobre Safin hubiera estado bien. Cary Joji Fukunaga fue la elección correcta para dirigir «No Time To Die», incluso si no fue el primero en este camino rocoso de la producción. Su vínculo se siente reverencial y clásico, pero no cursi, y toma decisiones audaces”.
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